Un pozo negro, o pozo ciego, es un depósito de aguas residuales que se hace junto a las casas cuando, por diferentes razones, no están conectadas al sistema de alcantarillado de la ciudad.

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Un pozo negro consiste en un agujero en la tierra con las paredes recubiertas de ladrillos y la base descubierta.

Al llegar las aguas residuales a la estructura, la parte líquida se va filtrando en el terreno y los sólidos quedan estancados mientras se produce el proceso de descomposición.

Los pozos negros se han prohibido en muchas partes del mundo, como consecuencia del impacto ambiental que provocan.

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PROBLEMAS DE LOS POZOS NEGROS

En la actualidad, los pozos negros han quedado obsoletos debido a la gran cantidad de problemas que provocan:

– Pueden contaminar las reservas naturales de agua dulce que están en las áreas superficiales.

– Como sus paredes y suelo son permeables, los residuos se van filtrando, ocasionando una contaminación del terreno.

– Debido a lo anterior, el tratamiento de las aguas negras no existe, ya que todos los contaminantes son absorbidos por la tierra.

– Se pueden desbordar.

– Pueden producir olores desagradables.

– Son poco higiénicos y pueden causar problemas de salud a humanos y animales.

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ALTERNATIVAS A LOS POZOS NEGROS

Si tu vivienda todavía cuenta con un pozo negro, desde Blue Red Saneamientos te animamos a cambiarlo lo antes posible por una fosa séptica.

Las fosas sépticas son estructuras especialmente diseñadas para tratar las aguas negras. Para ello, almacenan y eliminan los residuos fecales por medio de procesos de decantación y sedimentación. Cuentan con la tecnología y materiales especiales para tratar de manera correcta, eficiente y segura las aguas residuales.

Es así como pueden llegar a ser reutilizadas sin ningún inconveniente. Lo mejor es que no estarás contribuyendo con la contaminación ambiental.